Conocimiento valenciano para desafíos agrícolas nacionales: la nematóloga Kristell Santander lleva la experiencia de NEVAL a El Ejido
Una técnica de desinfección del suelo como la solarización puede parecer ajena a las explotaciones agrícolas valencianas, donde los cultivos bajo invernadero son anecdóticos. Pero cuando se trata de salud del suelo, diagnóstico nematológico y sostenibilidad hortícola, el conocimiento no tiene fronteras. Tampoco lo tiene la experiencia de nuestros colegiados.
Kristell Santander, ingeniera agrónoma colegiada del COIAL y directora de I+D en la empresa valenciana NEVAL, acaba de participar en una jornada técnica celebrada en El Ejido (Almería), uno de los mayores polos hortícolas de Europa, para compartir su experiencia en nematología aplicada a cultivos intensivos bajo invernadero.
La cita, organizada por Massó Agro Department con la colaboración de NEVAL y Sotrafa, ha reunido a técnicos y especialistas de primer nivel en torno a un objetivo común: mejorar la sostenibilidad del suelo agrícola mediante una correcta estrategia de solarización, una técnica que utiliza las altas temperaturas del verano para reducir la carga de patógenos en el suelo.
Un suelo sano empieza por un diagnóstico experto
En este contexto, la aportación de Kristell Santander fue clave para explicar los efectos de la solarización sobre los distintos grupos de nematodos presentes en el suelo, diferenciando entre los fitoparásitos —especies del género Meloidogyne, especialmente problemáticas en cultivos hortícolas— y aquellos nematodos beneficiosos que contribuyen al equilibrio biológico del suelo.
“El calor extremo puede ser un arma de doble filo”, asegura Kristell. Mientras que ayuda a reducir poblaciones de Meloidogyne incognita, javanica o arenaria, también puede comprometer gravemente a nematodos útiles como los bacteriófagos, fungívoros u omnívoros, que desaparecen de las capas superiores del suelo tras el tratamiento térmico.
Para evitar estos efectos secundarios, Kristell Santander recomendó una estrategia post-solarización basada en la aplicación de bioestimulantes o regeneradores microbianos que ayuden a restablecer la funcionalidad biológica del suelo.
NEVAL y el COIAL: conocimiento con impacto más allá del territorio
La presencia de NEVAL en jornadas como esta no es casual. La empresa, que colabora activamente con el COIAL como entidad partner, ha logrado posicionarse como un referente nacional en diagnóstico nematológico y salud del suelo. El conocimiento que genera desde la Comunitat Valenciana se aplica ya en explotaciones agrícolas de todo el país, como demuestra su papel destacado en esta jornada técnica en El Ejido.
Pese a que la solarización se emplea sobre todo en zonas de invernaderos como Almería, la experiencia de profesionales como Kristell Santander permite trasladar metodologías, criterios diagnósticos y estrategias de manejo del suelo que pueden tener aplicación en otros modelos productivos. “La clave está en conocer el suelo, su biología y su respuesta a las distintas técnicas que aplicamos”, subrayó.
Una jornada técnica con ponencias de alto nivel
Junto a la intervención de Kristell Santander, la jornada contó con la participación de expertos en nutrición vegetal y tecnologías aplicadas a la solarización. Benito Ortega, de Massó Agro, abordó el uso de PERLKA para mejorar el estado nutricional del suelo antes del trasplante, mientras que Juan Francisco Martín, de Sotrafa, explicó el papel de los plásticos especializados en el éxito del proceso de solarización.
Sin embargo, la aportación valenciana destacó especialmente en el bloque centrado en la salud del suelo. El enfoque integrador que aporta la nematología —capaz de conectar los efectos del calor con la ecología microbiana y la productividad agrícola— posiciona a NEVAL y a su equipo como referentes en un ámbito muy especializado.
Desde el COIAL valoramos especialmente que nuestros colegiados sean reconocidos fuera de nuestra demarcación por su especialización, rigor y capacidad de transferencia. La participación de Kristell Santander en esta jornada refuerza el papel de la ingeniería agronómica en la mejora continua de la agricultura y demuestra que desde la Comunitat Valenciana también se construye futuro para otros territorios.