Partners24/04/2020

La biotecnología en el sector Smart Agro, una necesidad en tiempos de COVID-19

Todo está cambiando a gran velocidad, también la forma de afrontar la producción agrícola: la agricultura 4.0 está esperando que nos sumemos al cambio.
Nuestro sector agrario y agroalimentario está obligado a ser más eficaz si cabe ante la situación generada por la crisis sanitaria del COVID-19. La agricultura y los sectores de apoyo ya han demostrado ser actividades esenciales para la sociedad. El sector agrícola y ganadero de nuestro país, altamente competitivo a nivel mundial, nos ha permitido no depender de terceros países para asegurar el abastecimiento de la población, en contra posición de lo que ha sucedido con otros insumos. Pero es también previsible que sean capaces de suavizar los efectos de la evidente crisis económica derivada de la pandemia.
¿Cómo podemos lograrlo? Las tecnologías digitales, fisicoquímicas y biológicas han de unir esfuerzos para adquirir datos sobre la trazabilidad de los cultivos, su impacto medioambiental y la optimización de los recursos. Se ha de optimizar el uso del agua, de los fertilizantes y los fitosanitarios empleados, tenemos que conocer la calidad sanitaria de nuestros cultivos, hemos de controlar o mitigar los factores ambientales, todo ello con un fin: alcanzar los mejores rendimientos y la máxima eficiencia en la explotación agrícola. El análisis Big Data se plantea como una herramienta crucial para la mejora de la gestión de las explotaciones agrícolas, facilitando la toma de decisiones, principalmente en aquellos aspectos donde se requiere tener en cuenta un número de variables elevadas.
Pero creemos que una colaboración más solida entre empresas del sector y la aplicación del binomio tecnología-biotecnología van a ser factores clave para que las empresas agrícolas y agroalimentarias puedan hacer frente al gran reto de abastecimiento que se nos presenta.
Para ValGenetics SL, el concepto Smart Agro tiene que ir más allá y debe nutrirse de los avances biotecnológicos que se han alcanzado en el campo de la fitopatología, a través de novedosas herramientas como la aplicación del NGS en el diagnóstico.
Según nuestro colegiado Juan José Rodríguez, responsable comercial de ValGenetics, “las explotaciones agrícolas deben conocer el estado de las parcelas, no sólo a nivel de necesidades hídricas, fertilización, climatología, edafología o desarrollo vegetativo de los cultivos, sino que también requieren de un conocimiento dinámico de plagas y enfermedades en su entorno físico, y que este entorno pueda ampliarse en la medida de lo posible.”
Es esencial conocer en un breve periodo de tiempo y de forma precisa el estado sanitario de cada explotación agrícola y su entorno. Disponer de la ingente información generada por un análisis metagenómico (u otros análisis moleculares, como la PCR) para el diagnóstico de enfermedades y plagas en explotaciones agrícolas, bien sea a nivel de planta, suelo o agua, puede favorecer una gestión más adecuada de los tratamientos fitosanitarios y/o bioestimulantes, apoyando así a los sistemas SmartAgro. En definitiva, son herramientas que van a facilitar nuestra adaptación ante escenarios adversos como el COVID-19, la Xylella fastidiosa o el “greening” de los cítricos.
Ahora es el turno de la agricultura 4.0, de la agricultura del futuro. Y la biotecnología tiene mucho que aportar para lograr que nuestras explotaciones agrarias se conviertan en explotaciones “inteligentes”. La conexión de máquinas, sistemas y herramientas de todo tipo, que multipliquen y procesen los datos adquiridos para la toma eficaz de decisiones, servirá para
salvaguardar el papel fundamental de la agricultura y permitirá la adaptación de la misma a las nuevas necesidades socioculturales, medioambientales y alimentarias a nivel global.
Es el momento de mostrar la competitividad del sector, apostar por la I+D+i y continuar trabajando para abastecer a los mercados europeos.