Recogida de envases agrícolas y el cambio climático

En calidad de partner de COIAL se nos invita a participar en su nueva sección de comunicación “Observatorio contra el cambio climático”. En ella, y para enmarcar nuestro esfuerzo e implicación en torno al cambio climático, se nos destaca que se prevé una reducción en la productividad agrícola en la región mediterránea debido a los impactos a la que está sometida, como por ejemplo los incrementos de las temperaturas extremas, la reducción y mayor irregularidad de las precipitaciones o un mayor riesgo de sequías, así como de otros fenómenos extremos.

¿Cambio climático? Pues claro. Y quien a día de hoy lo siga negando con su postura pasa directamente a ser parte del problema. AEVAE es una Asociación joven, de reciente creación, y llevamos en nuestro ADN nuestro compromiso e implicación en la lucha contra el cambio climático. Y lo demostramos desde el minuto cero, ya que es una de nuestras razones de ser.

Partimos de la base que hablamos de cambio climático como concepto global y a partir de ahí, cada actividad que de forma directa o indirecta tenga una conexión con él adquiere una responsabilidad. El grado con el que se tome esta ya es cosa de cada uno. Para AEVAE, por la parte que nos atañe, nos lo hemos tomado como uno de los pilares de la asociación y lo abordamos desde diferentes frentes.

Entendemos que el cambio climático forma parte de la propia evolución del planeta y de la vida. El problema surge con la mala gestión que el ser humano hace de los recursos y como ello repercute en el Medio Ambiente generando problemas que nos afectan a todos. Nuestro ámbito de actuación es la agricultura en general y la recogida de envases agrarios una vez ha finalizado su uso por parte del agricultor en particular. Aunque parezca que actuamos en un pequeño eslabón de una larga cadena, tiene implicaciones en toda ella. Es un eslabón estratégico, ya que los cultivos están situados en áreas geográficas, muchas de ellas con posibilidad de un gran impacto medioambiental, como por ejemplo los localizados en algunas zonas integradas en parques naturales.

Los envases agrarios como sacos, botellas o garrafas son insumos utilizados para formulados de agronutrientes, bioestimulantes agrícolas o microorganismos, que gracias a nuestra actividad de recogida se integran en el circuito de su reciclaje. Con ello damos una solución eficaz y necesaria al problema del plástico, tan de moda en estos últimos tiempos. Y aquí una matización sobre la expresión ‘problema del plástico’. Si a día de hoy hubiese una alternativa al plástico, este ya no estaría. De hecho, en aquellos ámbitos que utilizan materiales plásticos de un solo uso ya se está actuando. Lo que sí hay es una mala gestión tras su uso en otros muchos casos. Y para dar una solución en el contexto de los envases agrícolas entramos nosotros.

Derivado de la recogida de envases, podemos poner como ejemplo nuestra contribución a la minimización de emisión de gases de efecto invernadero. Como asociación joven nos alegramos mucho en su día cuando, derivado de la recogida y la valorización, alcanzamos nuestras primeras 120 toneladas de envases, ya que con ello evitábamos la emisión a la atmósfera de 143 toneladas de CO2, lo que equivale a la acción de 10.291 árboles. En esta misma línea, a nivel de EPRO, del cual formamos parte, durante la campaña 2019 se recogieron y valorizaron 5.160 toneladas de envases, evitando la emisión de 6.191 toneladas de CO2, la acción de prácticamente medio millón de árboles.

Otro ejemplo de acciones es la pertenencia a otras asociaciones como la mencionada EPRO (European Association of Plastics Recycling and Recovery Organisations). En este caso, una asociación internacional de organizaciones especializadas en el reciclado del plástico que trabajan conjuntamente en el desarrollo de soluciones eficientes para una gestión sostenible de los productos plásticos ahora y en el futuro. Pertenecer a esta plataforma nos permite ser más eficientes en nuestras actividades de recogida, clasificación y tratamiento de plásticos, porque mediante esta cooperación internacional implementamos elementos y métodos de diferentes casos de éxito, colaboramos en el intercambio de conocimientos y en la evaluación de diferentes soluciones para el aumento del reciclaje de los plásticos.

Pero no es justo decir que AEVAE camina sola en la lucha contra el cambio climático, que es el caso que nos ocupa en este artículo. AEVAE representa el esfuerzo de sus cerca de 50 empresas asociadas. Son todas ellas empresas fabricantes o distribuidoras de productos envasados de fertilizantes, agronutrientes especiales, bioestimulantes agrícolas, microorganismos para el suelo y fauna auxiliar para cultivos ecológicos o lucha integrada que están sensibilizadas por el cuidado del medio ambiente. Empresas que luchan por sus clientes, para que sus cultivos sean rentables, porque su imagen es a veces maltratada injustamente desde un punto mediático y no debe ser así. Empresas que con su pertenencia a AEVAE permiten a sus clientes la recogida de sus envases ya vacíos y con ello les brindan una solución eficiente que también está dentro de una economía circular, otro concepto muy estrechamente ligado al cambio climático.